Sub 20 - Keep Walking

Por Otro Gato


El del domingo fue un partido que seguramente rompió el corazón de muchos aficionados peruanos que se habían ilusionado con ver a la sub 20 en el mundial de Turquía. Una decepción que se incrementó por la manera en la que la clasificación se nos negó en los últimos minutos del partido ante Chile. Y aunque es indiscutible el offside en esa última jugada, duele quedar eliminados así. Es como si #LaSuerteDeLaSelesión no quisiera vernos sonreír. 

Chile recibiendo ayuda de terceros desde 1879

Sin embargo, pese a no haber conseguido la clasificación, el Sudamericano nos deja muchas cosas positivas, como la aparición de varios jugadores, la gestación de una idea de juego y otras cosas para que nos leas pes gil (?). 

Evadimos el efecto 'Jotitas' 

Primero hay que considerar la eliminación como algo positivo. ¿Cómo que una eliminación puede ser positiva? Consideremos que Perú haya clasificado al mundial, en este momento hasta el tal Max Barrios haría comerciales de Mi Balón y/o Nazaro, Michelle Alexander ya estaría preparando su nueva miniserie titulada Los Ahmedcitos (?) y Carlin o algún otro morboso estaría haciendo reportajes a las familias de los jugadores. Es decir, exactamente lo mismo que pasó con los 'Jotitas', y ya vemos como terminaron. 

En ese sentido, la eliminación es positiva, porque evitamos todo ese circo y además porque ayudará a estos jugadores a madurar y a anhelar más el éxito. 

Estilo de juego, actitud y mentalidad ganadora 

Perú jugo como Perú, como el de antaño, poniendo la pelota al piso, tocando, haciendo lo que mejor sabe hacer el futbolista peruano: tener la pelota. Tuvimos mayor posesión de balón que nuestros rivales, dominamos varios tramos de nuestros partidos y generamos una gran cantidad de ocasiones de gol, que de haber concretado al menos la mitad, hoy seguramente estaríamos celebrando la clasificación.


Pero esta selección también destacó por su actitud en los momentos decisivos. Y si hay dos cosas en el fútbol aún más necesarias que el talento, estas son la actitud y la mentalidad ganadora. Y la sub 20 demostró tenerlas desde el arranque del torneo, en el que se pudo notar a un Perú diferente, con una buena idea de juego que siempre demostró en la cancha, madurez para manejar la presión y actitud para pelear los partidos y nunca darse por vencidos. 

Aún en los momentos más críticos, cuando la situación nos fue adversa, por ejemplo tras la derrota con Ecuador que nos dejó con la obligación de vencer a Brasil, los muchachos supieron manejar la presión y no solo los derrotamos, sino que gustamos y les pusimos la pelota al piso, como el manual del buen futbolista peruano manda. Lo mismo pasó cuando estalló el caso Max Barrios y todo lo que eso generó. El equipo lejos de perder el ánimo anímico, modo Kukin Flores on desmoronarse anímicamente, se hizo más fuerte. Lo demostraron también al vencer a Ecuador para seguir con vida en el hexagonal y hasta en los minutos finales del partido ante Chile, cuando ya las piernas no daban más. Precisamente a nuestro juego, actitud y mentalidad es que Perú nunca fue superado futbolísticamente por ningún rival. 

Chevere causa
 
Y todo esto también hay que reconocérselo a Ahmed que supo aprovechar las virtudes de sus jugadores, haciendo de Perú un equipo competitivo y que además gestó una idea de juego que el equipo supo plasmar en la cancha. Y Si bien es cierto que cometió errores en algunos partidos al hacer cambios que no le respondieron, no desprestigian la buena labor del argentino. 

Apariciones 

Bien dicen que no hay mal que por bien no venga, y si uno se pone a pensar, la mala situación de Alianza y la U durante el 2012, no fue tan mala después de todo, ya que ambos equipos recurrieron a sus juveniles para competir, y a ello se debe la grata aparición de jugadores como Reyna, Flores y Polo, que aportaron mucho al equipo, y de cuyas experiencias en primera división el técnico Ahmed supo sacar gran provecho.

La hermana de Benavente, lo mejor de Perú en el Sudamericano

Para destacar también la aparición de jugadores como Guarderas, Gómez, Deza, Hinostroza y Benavente que sin duda sacarán mucho provecho, para su formación, de esta experiencia. Lo importante es que estos chulls (?), que ya están en edad de jugar en primera, tengan la continuidad necesaria para seguir creciendo. 

Defectos 

No tuvimos la contundencia necesaria para concretar, siquiera, la mitad de las jugadas que generamos en todo el torneo. Esto en parte se debió a que ninguno de los jugadores titulares era un 9 neto, y aunque Yordy cumplió de gran manera esa labor, la presencia del 9 siempre es necesaria. Fue la falta de gol, la que nos costó la clasificación. 

En cuanto a la defensa, si bien se cumplió, sufrimos los errores de siempre, desconcentraciones en los últimos minutos que nos costaron puntos vitales. Sin embargo, estas son cosas se pueden mejorar con trabajo y la experiencia de los jugadores.


El estado físico también nos jugó una mala pasada. Si bien es cierto que nueve partidos en 24 días resulta excesivo, el trabajo físico debe ser intensificado. 

Finalmente, lo que se quiere es que esta generación no se pierda ni se quede en el olvido. Se quiere que estos chicos, que son los que disputarán las próximas eliminatorias, jueguen en sus equipos, se muestren, crezcan y en la medida de lo posible que emigren. Por último, queda aplaudir una muy digna participación peruana en este sudamericano.